viernes, 27 de agosto de 2010

Después de un mes...

se ven las cosas de forma distinta.
Te recuerdas llorando y te das pena, pero sabes que lo superarás.
Sin embargo, sientes que te has convertido en espectadora de tu propia vida, que no sabes que te ocurrirá en el segundo siguientem, ni dentro de dos semanas. Te sientes más insegura en tu vida que de costumbre. Es como si las riendas de tu vida se hubieran escapado de tus manos y te está costando más de lo normal encontrarlas. Pero no quiero dar un paso hacia delante, tengo miedo, tengo miedo de darlo y no saber si va a servir para avanzar o para retroceder más de lo normal. Creo que lo mejor es ser la espectadora de mi propia vida, mirar el tablero de ésta y ver cómo mueva ficha...

P.D: pensaba cerrar el blog una temporada, pero al final, he recapacitado.